Son dos de los minerales más importantes para una función cognitiva y emocional adecuada. Concretamente unos niveles bajos de hierro pueden resultar en alteraciones del comportamiento y el aprendizaje, especialmente si falta en edades tempranas. Así mismo, el hierro es necesario para la fabricación de importantes neurotransmisores como la dopamina (implicada en la motivación). En personas con TDAH se ha visto que, los niveles de hierro, a menudo están reducidos.

Por su parte el zinc es muy abundante en el hipocampo, una estructura cerebral implicada en la formación de nuevas memorias (memoria a corto plazo) así como en el aprendizaje, las emociones y la motivación.

Son dos plantas con reconocidas bondades a nivel cerebral.

La Bacopa es una planta extensamente utilizada como un soporte cerebral en situaciones de ansiedad, impulsividad e hiperactividad. Además del plano emocional, parece ayudar en procesos cognitivos (ej. memoria).

El Té verde es una planta de interés debido a su contenido en L-teanina, una sustancia que ayudar a reducir la ansiedad y aporta relajación sin afectar al estado de alerta. En la práctica esto implica que mejora la atención sin causar adormilamiento. La cafeína que acompaña de manera natural al extracto de Té verde, no excita, y contribuye a aumentar el estado de alerta y la atención, con lo que complementa el efecto calmante de la L-teanina.